Te necesito, ese cubito de hielo que me dejaste como recuerdo se derrite, y un charco de agua de tus labios se mezcla con mis lágrimas, formando surcos en él.

Vuelve, cada kilómetro que me separa de ti es una cicatriz en mi cara, enmarcada como un cuadro abstracto.

Pero no te preocupes, mi corazón sigue intacto, encerrado en una bolsa al vacio que solo tu risacortante puede abrir.

Esperaré, el verano es largo, el amor tambien.

Nunca pensé que engañarme a mi misma fuese tan fácil.

Es simple

Empieza por amar lo que te decepciona. Verás una cara bonita de cristal. Te acostumbrarás a pasar tus yemas sobre ese cristal. Luego encontrarás encantador lo que siempre has odiado

Adorarás tu odio.

Luego simplemente verás la rosa en vez de la espina.

Nunca caigas,la espina se acaba notando.

Aquel día de otoño el vapor frío del crepúsculo formaba telarañas escarchadas en la ventanilla del coche. El parabrisas dibujaba un cuadro abstracto que ya reclamaba tu regreso.

Pocas pero significativas lágrimas caían con efecto retardado de mis ojos.

El espejo retrovisor reflejaba a mi amiga, maletas en mano mirada perdida.

otra ciudad, otra vida

te echaré de menos

Me encantaba dibujar en tu espalda un tequiero con caligrafía de niña. Amaba tu andar descuidado y el ángulo que se formaba entre tu cabeza y tu cuello al girarte cuando me iba.

Odiaba el sabor a menta de tus labios, pero lo convertí en un vicio inconfesable.

Me gustaba aplastar con el dedo índice ese mechón acaracolado y rebelde que emergía de tu pelo.

Nunca dejé de extrañar tus huellas en mis huesos

Bipolaridad extremista. A veces me doy miedo hasta a mi misma. Dulce los lunes, agria los miércoles. Es sólo cuestión de entender lo agridulce. puedo quererte y morir por ti hoy, puede que mañana no entienda el porqué.

Fácil con mis amigos, experta en escuchar y máster en decir las cosas a la cara. Apasionada en el amor, fría en el desamor. Máscara adorable con sonrisa grapada que a veces suelo llevar puesta. Abierta, en general. Amante de lo especial, de las lágrimas de un chico. de las espaldas protectoras y de las sonrisas imperfectas, como yo